Merendar al calor del hogar durante los días de frío, con una bebida caliente y algo rico, es sin duda uno de esos placeres de la vida que no se pueden pagar con dinero. Este bizcocho de limón y almendra es perfecto para ello, así como para pasar un rato divertido y de desconexión en la cocina. Además, la dificultad es baja, así que es apto para principiantes para esto de la repostería. Te dejo la receta a continuación.

Ingredientes

200 g harina
100 g harina de almendra
130 g de azúcar
130 g de mantequilla a cubos a temperatura ambiente
75 g de nata
4 huevos
Zumo de 1 limón (100 ml aprox.)
Rayadura del limón
2 parejas de gasificantes
glaseado: 3 cucharadas de azúcar glass por una de zumo de limón (aprox.)

Receta bizcocho de limón y almendra

Rayamos el limón y frotamos las rayaduras con el azúcar para que suelte la esencia, cuanto más tiempo lo hagas mejor sabrá. Verás que el azúcar se pone amarillo, no te preocupes, es justamente lo que pretendemos.
Precalentamos el horno a 180ºC.
Añadimos la mantequilla a la mezcla del azúcar y batimos hasta tener una crema suave.
A continuación añadimos los huevos y batimos. Seguidamente, incorporamos la nata, el zumo de limón y volvemos a batir.
Añadimos la harina almendra con la normal y los gasificantes tamizándola. Mezclamos hasta integrar todo en la masa.
Echamos nuestra masa sobre un molde previamente forrado con papel de horno.
Horneamos durante 35/40 minutos o hasta que pinchándolo el palillo salga limpio.
Para el glaseado solo tenemos que mezclar el azúcar con una cucharada de limón. Cuanto más zumo echemos, más sabrá a limón, pero también más líquido será.
Una vez listo el bizcocho, dejamos enfriar totalmente. Finalmente, echamos el glaseado por encima y listo.